Aunque cada vez son menos las personas que manejan autos con transmisión manual, los que lo hagan querrán extender la vida útil del embrague, para ellos hemos preparado estos 5 consejos, comencemos por el principio.
¡Lógralo tomando en cuenta los siguientes 5 consejos!
La respuesta a esta pregunta está en el manual de usuario de tu coche, ya que como mencionamos anteriormente, esto depende de cada modelo. En dicho manual, podrás encontrar el tiempo mejorado para reemplazar tus bujías; sin embargo, es importante que estés consciente de que las bujías son una de los elementos de mayor desgaste en nuestro auto, por ello será una de las refacciones que constantemente deberás cambiar.
1. Usa el freno de mano para arrancar
Si usas el freno de mano para arrancar en pendientes, evitarás que tu auto ruede hacia atrás y con ello reducirás la carga para el embrague.
2. No “juegues” con el pedal para empezar a moverte
No utilices el embrague para detener tu auto en pendientes, ya que de esta forma, pones el clutch en fricción y con ello provocas que este se caliente y por supuesto se dañe.
3. Usa neutral cuando estés detenido
Cuando detengas tu auto en un semáforo o por tránsito lento , evita mantener el pedal de marcha presionado, ya que no es necesario, lo recomendable es dejar tu auto en neutral, y embragar unos segundos antes de arrancar.
4. No recargues tu pie izquierdo en el pedal
Por muy cómoda que parezca esta práctica tan común, lo cierto es que daña la vida útil de tu embrague, así que evítalo.
5. No fuerces el embrague, no aceleres sin razón
Procura que cuando arranques tu auto, las RPM del motor (revoluciones por minuto) no sean demasiado altas, intenta acelerar solo lo necesario, esto con la finalidad de no provocarle tensión a tu embrague en los componentes de la transmisión.
Por último, te contaremos acerca de algunas de las fallas más comunes que puede presentar tu sistema de embrague para que aprendas a identificarlos a tiempo.
Elementos que te ayudarán a detectar fallas en el sistema de embrague de tu auto
● Deslizamiento del embrague
● Ruido de fricción durante el cambio de velocidades
● Pedal atorado o fuera de su sitio
● Tu auto no acelera como debería al realizar un cambio